Orizaba, Ver.- Aunque el sur del país se encuentra en alerta por la presencia del gusano barrenador del ganado en12 países de América del Sur y el Caribe, en la región se mantienen desde hace muchos años medidas fitosanitarias que han permitido que hasta la fecha no se presente esta enfermedad, expuso el presidente de la Asociación Ganadera de Orizaba, Julio Palafox Lezama.
En entrevista explicó que la aparición de esta plaga suele estar asociada a las condiciones de crianza en potrero, donde los animales están expuestos a mayor humedad y suciedad. «Allá, porque tienen el ganado en potrero, entonces crecen las vacas en el agua y entonces crean y en el ombligo del becerro, pues un partido se le meten las bacterias y es ahí a donde sucede problemas en el gusano barrenador”.
Por ello dijo que los ganaderos de Orizaba mantienen a sus animales estabulados, lo que les permite implementar medidas preventivas más efectivas. «Aquí gracias a Dios no se han presentado casos, o sea, porque como las tenemos estabuladas, entonces cada vaca que va a criar se pone mayor atención, le tiramos aserrín, cama de paja seca y todo eso e inmediatamente que nace, se le aplica un poco de azul de metileno”.
Detalló que el gusano barrenador, es una larva que se alimenta de tejido vivo y puede causar la muerte de los animales, especialmente de los becerros. «Mata principalmente, al becerro y lo mata, porque se mete por El ombligo y se contamina. Por eso le llaman gusano barrenador, porque como se infecta de gusanos y hay veces que se logran este salvar, pero hay que meter antibiótico, hay que retirarlo, ponerlo en un lugar seco”.
Reiteró que, gracias a las prácticas de manejo y las medidas sanitarias implementadas en la región, los ganaderos de Orizaba han logrado mantener a sus hatos libres de esta peligrosa plaga.
Y es que de acuerdo con un informe reciente de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA), la plaga se encuentra presente en Argentina, Bolivia, Brasil, Cuba, Haití, Paraguay, República Dominicana, Uruguay y Venezuela; mientras que en Costa Rica, Ecuador, Panamá y Perú es una enfermedad “presente limitada a zonas», por lo que la SADER advierte que la diseminación de la plaga y su avance hacia la frontera sur del territorio mexicano hace necesario implementar acciones de prevención por la movilización de animales y personas, así como la apertura comercial entre los países.